El drama de los inmigrantes no se detiene. Son 177 inmigrantes a los que el ministro del Interior, del partido de extrema derecha Liga, había negado autorización para bajar a tierra, lo que llevó a Roma a insistir en que debe actuar la Unión Europea para redistribuir a los refugiados, que finalmente lograron el permiso de desembarco.

El presidente de la Cámara de Diputados de Italia, Roberto Fico del socio de la Liga en el gobierno Movimiento 5 estrellas, opinó que las negociaciones para que estas personas sean distribuidas en países europeos puede continuar después de que desembarquen en Italia.

El primer ministro Giuseppe Conte ha hecho un llamamiento a los socios de la Unión Europea para que acepten a algunos de los inmigrantes, un drama que no tiene fin.

España

Al mismo tiempo, un centenar de subsaharianos han saltado la valla que separa Ceuta de Marruecos. Seis agentes de la Guardia civil española resultaron heridos tratando de contener la entrada de los 116 inmigrantes que emplearon cal viva, palos y excrementos, que arrojaron a los guardias, como ya ocurrió en el último salto del mes pasado en el que más de 600 personas lograron entrar en España.

Desde entonces, el Centro Temporal de Inmigrantes hacia el que han corrido nada más entrar en Ceuta continúa colapsado. Las ambulancias de la Cruz Roja, han tenido que acudir urgentemente hacia el CETI, donde han atendido a varios subsaharianos de heridas, cortes y contusiones provocados por las concertinas colocadas en la valla fronteriza. Cinco de ellos han tenido que ser hospitalizados.













Jueves, 23 de agosto de 2018