El partido del mandatario Michel Temer mantuvo este miércoles el control del Senado por los próximos dos años al ser elegido presidente de ese cuerpo legislativo, y segundo en la sucesión presidencial, el senador Eunício Oliveira, uno de los políticos citados por la constructora Odebrecht como depositario de dinero ilegal para campañas y de supuestos sobornos.

Oliveira, del estado de Ceará (noreste), es uno de los principales referentes del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) y prometió colaborar con las reformas laboral y del sistema previsional que impulsa Temer.

El nuevo jefe del Senado venció por 61 votos contra 10 a su rival, José Medeiros, también de la base aliada de Temer, mientras que otros 10 votaron en blanco.

El bloque del Partido de los Trabajadores (PT) votó dividido: algunos lo hicieron por Oliveira pero tres senadores se opusieron férreamente debido a que consideran al nuevo jefe de la Cámara alta como uno de los conspiradores que permitieron la salida anticipada de Dilma Rousseff de la presidencia por el juicio político al que la sometieron el año pasado y permitió la llegada al poder de Temer, antes vicepresidente.

Tras la elección del Senado, mañana debe elegirse al número dos del país, el presidente de la Cámara de Diputados, para lo cual es favorito el actual titular del cuerpo, Rodrigo Maia, del conservador Demócratas, también aliado de Temer e incluido en la lista de supuestos políticos corrompidos con dinero ilegal por parte de Odebrecht.

Reemplaza Oliveira a Renán Calheiros, quien el año pasado causó un choque institucional con el Supremo Tribunal Federal (STF, corte suprema) al desconocer un fallo que lo suspendía del cargo por estar procesado en una causa y ahora pasará a presidir el bloque del PMDB en la Cámara alta.

"Queremos simplificar la vida de los ciudadanos, ayudar a crear un clima de negocios favorable ante un horizonte adverso", dijo el nuevo titular de la Cámara alta en la semana en la que datos oficiales clavaron el récord de 12% de desempleo en medio de la recesión y un déficit fiscal, también histórico.

El PT se dividió debido a que una parte del bloque quería mantener un lugar en la mesa directora del Senado y así ir detrás de Oliveira y otra fue partidaria de romper con los "golpistas", según dijo el senador Lindbergh Farias, contrario al pacto.

Pero Oliveira es responsable, en parte, de la gran jugada jurídica que permitió que Rousseff, destituida, no pierda los derechos políticos por diez años y es por eso que parte del PT no le dio el voto condenatorio.

El candidato del PMDB derrotó a José Medeiros, un ultraconservador del estado de Mato Grosso (centro-oeste), también de la base de apoyo de Temer.

Oliveira es un empresario millonario del estado de Ceará que, según el diario Folha de S.Paulo, tiene un patrimonio declarado de unos 35 millones de dólares. la mayor parte producto de sus empresas que se dedican a vencer licitaciones como proveedores de servicios de las compañías públicas.

Recientemente, acusó a los delatores de la Operación Lava Jato de "mentir por desesperación" para involucrarlo en su contra.
Pero Claudio Melo, ex ejecutivo de Odebrecht cuya delación integra la de otros 77 hombres clave de la empresa de ingeniería, reveló que le pagó unos 650.000 dólares hace menos de cinco años para aprobar una ley que beneficiaba a compañías de construcción.

El ex senador Delcidio Amaral, expulsado de la Cámara alta por corrupción, vinculó sobornos de laboratorios y compañías de seguros con la designación de hombres cercanos a Oliveira.

La elección en Diputados, que se vislumbra más disputada, tendrá también la marca de la explosiva "lista de Odebrecht" en poder del Fiscal General, Rodrigo Janot, luego de que las confesiones de los ejecutivos relatando haber corrompido hombres públicos fueran validadas por la corte suprema el lunes pasado.

Es que el actual jefe de Diputados está identificado como "Botafogo" en la lista de Odebrecht, acusado de pedir a un ejecutivo cubrir una deuda de campaña por orden de 150.000 dólares en 2010.

Las jefaturas de las casas legislativas ganan relevancia debido a la fragilidad institucional que puede sufrir Temer, ya que el Tribunal Superior Electoral (TSE) debe juzgar si en sus cuentas de campaña hubo donaciones vinculadas a la corrupción, una explosiva causa que podría concluir separándolo del cargo en caso de que sea responsabilizado.

Jueves, 2 de febrero de 2017