Un joven fue fusilado en plena calle, luego de que éste le confesara a un uniformado que mantenía relaciones con su pareja. El efectivo se dio a la fuga luego de cometer el crimen, pero dos horas más tarde se entregó voluntariamente a las autoridades confesando el homicidio.

En horas de la mañana de ayer, encontraron el cuerpo sin vida de un hombre de 30 años identificado como Domingo Ramón González Sandoval. El desenlace fatal tuvo como escenario al barrio Lomas de esta Capital. Fuentes policiales revelaron que se maneja la hipótesis de un crimen pasional y que el sindicado como autor material del hecho fue un cabo de la Policía, quien luego de huir del lugar donde cometió el homicidio, se entregó a la Policía por su propia voluntad.
En el barrio Lomas de esta Ciudad encontraron sin vida a un hombre de 30 años aproximadamente con cuatro impactos de arma de fuego, dos en la zona del cuello y dos en el abdomen. El hecho se produjo a las 9, en un camino vecinal ubicado a la vera de la ruta 5 a la altura de la estación de servicio Pacheco, en una zona denominada camino a La Arenera. El presunto autor del homicidio fue identificado como Martín Gómez, cabo primero de la Policía de Corrientes, quien prestaría servicio en la Comisaría 21 ª del barrio Pirayuí.
El comisario Rodríguez, a cargo de la investigación, confirmó a Radio Sudamericana las identidades de los involucrados en el caso e indicó que el arma de fuego utilizada se trataría de una pistola 9 milímetros.
Una testigo que se encontraba en el Saps San Ignacio, ubicado a escasos metros del lugar, relató a EL LIBERTADOR: "A las 8.40 de la mañana, tanto el personal como los pacientes que nos encontrábamos en la salita escuchamos entre cuatro y cinco disparos ejecutados en forma consecutiva. Cuando salimos, llegamos a ver que un policía se alejaba en una moto, y que éste iba acompañado de otro hombre". "Este hombre, de apellido Sandoval, quedó tirado en medio de la calle. Alrededor de su cuerpo había cuatro vainas servidas; estaba inmóvil y ya no respiraba", explicó.
Todo comenzó cuando la víctima fue abordada por el uniformado en una vereda del barrio, alrededor de las 8.40. En ese momento, comenzó una fuerte y acalorada discusión entre ambos, en la cual Sandoval le confesó al agente que mantenía una relación adúltera con la pareja de éste. Según detallaron los testigos, el policía cegado por la irá lo arrastró del brazo hasta el medio de la calle, y en segundos lo ejecutó de varios disparos a quemarropa. Luego de esto, el cabo huyó del lugar.
Para las 8.45, arribaron al lugar efectivos policiales junto con personal médico y peritos de la Dirección de Criminalística a resguardar la escena.

Viernes, 27 de febrero de 2015