Una pesquisa reveló rastros de sangre en la casilla del barrio Ralín en Curuzú Cuatiá, donde habría ocurrido el asesinato y posterior cercenadura de un adolescente, cuyo torso y miembros inferiores fueron hallados hace una semana en las inmediaciones de las vías del tren.

informó ayer a NORTE de Corrientes el fiscal del caso que detalló que los dos sospechosos fueron trasladados a la Alcaldía local y se abstuvieron de prestar declaración durante la indagatoria.

En horas de la noche del martes, peritos forenses en presencia de las autoridades judiciales a cargo de la instrucción de la causa realizaron una prueba de luminol en la vivienda de uno de los dos hombres aprehendidos por el truculento crimen.

Según el representante del Ministerio Público, Jorge Esper, dentro de la precaria casa “el resultado fue positivo para sangre, en un lugar hay una buena cantidad”. Este diario lo consultó respecto si también encontraron vestigios sanguíneos o de otros fluidos biológicos en el póster de San La Muerte que había dentro de la propiedad y que se encuentra secuestrado como evidencia. Esper respondió lacónico: “No había”. La prueba, si bien no es concluyente, induce a los investigadores a considerar que en ese domicilio se produjo el homicidio y la mutilación de la víctima.

La semana pasada se había allanado la morada y confiscado, entre otras cosas, dos colchones con notorias manchas de sangre. Los dos sujetos apresados por el asesinato fueron indagados el lunes por Esper pero se abstuvieron de declarar.

Luego fueron retirados de la Comisaría 2ª y llevados a la Alcaldía, donde fueron alojados acusados del delito de “homicidio agravado”. “Hay que tener en cuenta que la investigación apenas tiene una semana, estamos investigando todas las hipótesis que van surgiendo”, manifestó el fiscal. Hoy o mañana llegarían los resultados definitivos de la autopsia y con ellos se clarificarían las dudas respecto a la ausencia de vísceras y del trascendido que habla sobre un abuso sexual. s

Jueves, 7 de agosto de 2014