A diario vemos opiniones, aún de personas con elevado rango entre las autoridades, emitir lo que yo llamaría "opiniones ignorantes" Alguien dijo que la paciente en el ojo de la tormenta que importó el virus a Goya desde Buenos Aires, es una "paciente asintomática". Puede ser cierto, pero éso le concierne sólo a élla. Al tener 20 años, probablemente no le pase nada, pero contagiará a sus padres, que al ser mayores, ya no será tan simple; al tío, al abuelo, al vecino, al verdulero, y a su vez cada uno de ellos a los 14 días se verá como pasa a otros. Probablemente no se salve nadie de la población de Goya, hasta ahora virgen del virus.

Oí hablar de "aislamiento domiciliario": ésto es un oxímoron. No existe un aislamiento domiciliario, salvo que la casa cuente con un calabozo con baño y una cinta transportadora para los alimentos, y que la llave no esté accesible a los familiares, que por motivos sentimentales, puedan abrir la puerta. Verdaderamente un oxímoron.
Oí decir que "la culpa la tuvo el colectivero" Es como decir que el problema de Vicentín lo creó el ordenanza, o la cafetera. O que en el Ejército la culpa la tuvo el soldado, de una situación desastrosa.
Dr. José Alejandro Delzotto
Médico. - M. P. 38.133
GOYA
La nota fue enviada a redacción de TNGoya



Martes, 7 de julio de 2020