Se realizan patrullajes por tierra y por agua. El río Paraná marcó 73 centímetros. Hasta ahora hay pocas perspectivas de cambio.

La cuenca del río Paraná se está viendo seriamen­te afectada por la mayor bajante registrada en los últimos 50 años y las pers­pectivas continúan siendo negativas. Ayer, en Corrien­tes marcaba 73 centímetros.

El sector del combustible mostró preocupación por la bajante debido a que podría afectar al suministro de combustible, pero como la demanda no es significativa en este tiempo de cuaren­tena, todavía se cuenta con stock suficiente.

Otra cuestión que preocupa es la situación de la fauna íctica, por lo que se realizan constantes con­troles. “Tenemos disposi­ciones que están en plena vigencia. La pesca de sub­sistencia estaba permitida pero también se prohibió por la situación del río que cada día es más desespe­rante. A menor cantidad de agua, los cardúmenes quedan más expuestos y la gente tampoco colabora­ba”, comentó el titular de Recursos Naturales de la Provincia, Carlos Bacqué.

En ese sentido, agregó que se efectúan dos ti­pos de patrullaje, uno por agua, junto con Prefectura y el otro por tierra. “Para realizar el patrullaje por agua tenemos que tener las embarcaciones adecuadas para navegar en este con­texto para evitar que los cardúmenes pueden reci­bir algún daño entones lo hacemos con Prefectura”, contó.


El motivo de la bajante es la falta de precipitaciones. La mayoría de los aportes de la cuenca del Paraná vie­nen de la lluvia en la alta cuenca donde ha llovido muy poco. En ese sentido, Bacqué señaló: “Seguimos con lluvias que no son sig­nificativas como para poder tener una incidencia direc­ta en el estado de situación del río. Estamos hablando de lo que resta del mes de mayo y junio, que en un principio se decía que a partir de ese mes empezaría un repunte, pero de acuer­do a informes, la situación sigue siendo la misma.

En ese mismo sentido se expresó el ex director de Estudios Básicos de la Ad­ministración Provincial del Agua de Chaco, Hugo Rohr­man. Explicó que, simultá­neamente, tanto el Servicio Meteorológico Nacional como el de Brasil, “están anunciando que las preci­pitaciones de acá a tres me­ses van a ser menores que lo normales. Esta bajante va a seguir y probablemente con valores similares a los actuales o menores, porque estamos en una zona de transición, entre la Pampa Húmeda y Brasil”.s



Miércoles, 13 de mayo de 2020