¿Quién diría que, a estas alturas del siglo XXI, casi el 47 por ciento de los embarazos son no deseados? ¿Y que, de este porcentaje, prácticamente la mitad, termina en interrupciones voluntarias? Según un estudio realizado en mujeres de países desarrollados, así es, y se debe, principalmente, al mal uso de los métodos anticonceptivos.

Para reducir en gran medida este porcentaje tan elevado, podría bastar con la utilización de anticonceptivos de larga duración, conocidos como LARC. Según la Dra. Carmen Pingarrón Santofimia, Jefe de Equipo de Obstetricia y Ginecología del Hospital Quirónsalud San José de Madrid, éstos contraceptivos “son más eficaces porque funcionan de forma independiente de la participación de la mujer”.

Entre los LARC, los dispositivos intrauterinos (DIU) son los más demandados gracias a que cuentan con una efectividad de más del 99%, lo que conlleva que tan solo una de cada 100 mujeres que utiliza estos métodos se queda embarazada. Unos datos que le convierten en uno de los métodos anticonceptivos más eficaces métodos que existen hoy en día.

Actualmente, en el mercado existen dos tipos de DIUS, los de cobre y los hormonales. “A diferencia de las píldoras o anticonceptivos orales, con el DIU hormonal la paciente continúa generalmente con sus ovulaciones, pero suele tener unas reglas más cortas y menos abundantes llegando, en algunos casos a no sangrar, algo que no debe preocupar, pues es un método muy seguro”, afirma la doctora Pingarrón.

El funcionamiento del DIU hormonal es sencillo, una vez colocado en la cavidad uterina, el dispositivo libera, de manera habitual, pequeñas dosis de levonorgestrel, una hormona similar a la progesterona que produce el ovario en cada menstruación y que prepara el útero para la fecundación.

La doctora Pingarrón explica cómo actúa este método para prevenir el embarazo: “El moco cervical se vuelve muy espeso, lo que actúa como una barrera muy potente que impide el paso de los espermatozoides a través del mismo, y de esta manera el óvulo y el esperma no podrían llegar a juntarse. También se reduce el espesor del endometrio, que es el encargado de anidar el embrión en el caso de que haya un embarazo.



Hasta 5 años de duración

La duración de un DIU hormonal es de 3 a 5 años, según la cantidad de progesterona que contenga. Dependiendo de si tiene más o menos carga hormonal, existen actualmente en el mercado tres dispositivos intrauterinos: ‘Mirena’, ‘Kyleena’ y ‘Jaydess’.

El otro tipo es el de cobre, un pequeño dispositivo de plástico flexible en forma de T, la línea vertical está rodeada de hilo de cobre que impide el paso de los espermatozoides. “Su mecanismo de acción es estimular la liberación de leucocitos y prostaglandinas (PG) por el endometrio, que son sustancias hostiles tanto para los espermatozoides como para los óvulos y los zigotos, asimismo, empeoran el ambiente en el endometrio dificultando la implantación”, explica la ginecóloga del Hospital Quirónsalud San José.

Al contrario que el DIU hormonal, el de cobre, puede aumentar la duración y la cantidad de reglas, sobre todo en mujeres que tienen tendencia a sangrados abundantes por diferentes motivos, como tener miomas o estar en la premenopausia.

Entre los dispositivos intrauterinos de cobre, lo último que hay en el mercado es el IUB o DIU inteligente. Este IUB (Bolas Intra Uterinas, en sus siglas en inglés) consta de unas 17 pequeñísimas perlas de cobre, y una vez introducido en el útero, adopta una forma redonda y suave sin bordes afilados ni esquinas. Es más fácil de insertar y disminuye considerablemente los sangrados que solía provocar el clásico DIU de metal.

No obstante, ante tanta variedad de dispositivos es el ginecólogo quien debe aconsejar a cada paciente cuál es el más adecuado, el que más le conviene y cuál se adapta mejor a sus necesidades, según el momento de su vida, informando de los beneficios y efectos secundarios que conlleva utilizar uno u otro.




Viernes, 6 de marzo de 2020