La artritis reumatoide es una enfermedad que mantiene una similitud con otros tipos de trastornos y debido a ello es muy difícil de diagnosticar. Esto genera que se en algunos casos se detecte de manera tardía y los síntomas sean más complejos de controlar, extendiendo el plazo de los tratamientos y su nivel de intensidad.

Uno de los estudios más en dar resultados rápidos y bastantes certeros es un análisis de sangre que determine la velocidad elevada de la proteína C. A pesar de ello existe un gran porcentaje de error que hace que no sea un marcador específico de la artritis reumatoide.


Una investigación de la Universidad de Cornell en Estados Unidos afirma que existe una relación entre la temperatura de la palma de las manos con el padecimiento de la artritis reumatoide.

Es a partir de ello que se desarrolló un procedimiento que sería más preciso al momento de diagnosticar la enfermedad. “La termografía es una técnica emergente con el potencial de ser una importante herramienta clínica en varios campos de la medicina, ya que las enfermedades varían la magnitud y el patrón de emisión de calor de las personas afectadas”, describe el estudio.

La termografía infrarroja es un procedimiento que capta imágenes y “produce un termograma de la piel en un paciente”. Esta técnica es utilizada actualmente para la detección de enfermedades como la diabetes o el cáncer de mama.

Hasta el momento el estudio se encuentra en estado de prueba, siendo aplicado en 82 pacientes, de los cuales 51 no presentaban ningún síntoma y 31 padecían artritis reumatoide.

“El objetivo del estudio era determinar si los pacientes enfermos pero sin síntomas de inflamación o dolor tenían diferentes patrones termográficos en comparación con los sanos”, sostienen los investigadores y desarrolladores del estudio.

Viernes, 6 de diciembre de 2019