Con un 49% de pobreza reinante en nuestra sociedad, el inconformismo subsiste entre los empleados públicos: médicos, docentes, policías, administrativos en general, con respecto a varias cuestiones que atañen al quehacer diario. A partir de percibir cada mes los salarios más cercanos a la indigencia que acercarse a estándar mínimo de confort.

Ejemplos sobran. Los bajos salarios están más cerca de la línea de indigencia, falta de insumos y equipamientos en varios organismos, ausencia definitiva de paritarias, escasos compromisos institucionales jamás cumplidos, políticas salariales dictatoriales; sobrepoblación de factureros y monotributistas.



De cara a las elecciones que se avecinan, se asegura que en el mano a mano, en las caminatas o mítines políticos, en las casas partidarias, siempre se intentará un acercamiento con el candidato (se eligen inicialmente legisladores provinciales), para obtener un compromiso serio, capaz de realizarse en la próxima gestión legislativa en la provincia a partir de diciembre.



Una voz de alerta, enciende la luz sobre la inestabilidad laboral, con el simple hecho de no haber fuentes de trabajo en la provincia y la sobre existencia de monotributistas, factureros y consejeros, quienes podrían poner en riesgo la estabilidad de la administración pública.

Jueves, 16 de mayo de 2019