British American Tobacco -dueña entre otras de las marcas Lucky Strike, Pall Mall, Viceroy, Camel y Parisiennes- advirtió que la reforma impositiva que debate el Congreso, y que introduce nuevas tasas tributarias para el sector, afectará sus operaciones en Argentina y terminará beneficiando a su rival, Massalin Particulares, que maneja Marlboro y Philip Morris.

La empresa advirtió, en un comunicado y en una solicitada, que la presión impositiva está generando complicaciones a su operación en el país, por lo que la casa matriz, con sede en Londres, tuvo que hacer este año un aporte de capital de 35 millones de dólares.



"Tenemos la intención de seguir invirtiendo en la Argentina, no nos vamos a ir, pero queremos ver cuál es el resultado de las reformas en nuestro modelo de negocios", expresó Marcelo Alvarenga Guimaraes, Gerente General de BAT Argentina, en contacto con la prensa.



El punto de la empresa es que la reforma tributaria beneficia a su competencia directa, Massalin Particulares, porque dispone una rebaja impositiva en el segmento donde esa compañía lidera con sus productos, mientras que impone mayores impuestos en el tramo de cigarrillos más baratos, donde British American Tobacco es más fuerte.



"El proyecto de reforma beneficia solamente al líder del mercado, Massalin Particulares (Phillip Morris International), aumentando su rentabilidad y provocando una concentración aun mayor del mercado legal. Esto se debe a que sus marcas tienen mayor peso en los segmentos de precios medios y altos, en los cuales la carga tributaria baja, y menor peso en el segmento de precios bajos donde la carga sube significativamente. Massalin Particulares tiene hoy el 70 % del mercado y pasará a tener 75 % en 2018 como consecuencia de la reforma", sostuvo BAT en un comunicado.



Según Alvarenga Guimaraes, el sector viene soportando un incremento de la presión fiscal, que comenzó con una suba del impuesto interno que grava la actividad en mayo pasado.



La compañía explicó que en el período 2011-2016 acumuló pérdidas por 90 millones de dólares, y advirtió que una mayor caída en el consumo repercutirá en las compras de tabaco que hacen a productores del norte del país.



También manifestó que esta suba de la presión tributaria generará mayor comercio ilegal, y estimaron que por este motivo el Estado dejaría de recaudar en 2018 más de 10 mil millones de pesos.



Directivos de Massalin, consultados por Télam, indicaron que la reforma tributaria "impactará por igual en todos los actores del sector" y negó que los cambios impositivos que estudia el Congreso los beneficien particularmente.

Miércoles, 13 de diciembre de 2017