SEG{UN LA PROFESORA EN HISTORIA, MARGARITA FOGANTINI
El pozo descubierto en la Catedral, una huella de lo que fue Goya en el siglo XIX
El pozo que quedó al descubierto en la base de la Iglesia Catedral de Goya Nuestra Señora del Rosario fue causa de especulaciones diversas y también promotor de la sed del conocimiento. La particular construcción que quedó a la vista consiste sin dudas en un vestigio de épocas anteriores y es testigo mudo de gran importancia. Al respecto, la profesora en Historia, María Margarita Fogantini, contó cómo fue su intervención en torno al descubrimiento.
A la par, la arquitecta María Teresa Pérez Slanac también aportó gran ayuda profesional para ahondar en el tema. ¿Podría describir las características del lugar del hallazgo? La planta de la Iglesia Catedral de Nuestra Señora del Rosario es de característica basilical. Tiene una alta y amplia nave central y cuenta además con dos naves laterales. El pozo está ubicado en la línea del eje principal, a pocos metros de la cabecera, que es el área más próxima al altar. Al levantar las baldosas de la iglesia Catedral goyana, ¿con qué se encontraron? El párroco de la Iglesia Catedral, Juan C. López, estuvo desde el primer momento y fue quien autorizó a levantar baldosas para ver qué sucedía en el piso semihundido. Llegué al lugar unos días después cuando ya estaban levantadas las baldosas graníticas de ese sector del piso. ¿Qué tipo de pozo es? ¿Es una construcción que se asemeja a un aljibe, un pozo de agua, un túnel? Un pozo de agua. Algunas antiguas construcciones también podían tener espacios o pasillos subterráneos o túneles para conectar la iglesia con otros edificios del antiguo casco céntrico de la ciudad. Algunos especialistas también dan cuenta de que en algunos edificios antiguos se realizaban túneles para proveerse de agua desde el río en caso de que fueran sitiados por antiguos nativos o enemigos. ¿Existe la posibilidad que debajo de la Iglesia Catedral Nuestra Señora del Rosario existan estos espacios subterráneos? Entiendo que no hay espacios subterráneos. ¿Se puede precisar la época de construcción de lo que fue hallado debajo de la iglesia? Se podría ubicar la construcción de ese pozo entre 1807 y 1885, teniendo en cuenta que la primera capilla fue concluida en 1807 y la actual Catedral fue inaugurada el 15 de agosto de 1885. ¿Podría describir los objetos que fueron encontrados debajo de las baldosas? Esto es lo que yo vi: envases de bombones Doña Jimena, contenedores en desuso de galletitas Express, cascotes y tierra. Doña Jimena es una empresa dedicada a la fabricación de dulces, chocolates y mazapanes, desde la década del 60 y los envases fresh-pak de las galletitas nacieron de la mano de Bagley en 1981. ¿Fueron encontrados algún tipo de objetos de valor monetario, elementos religiosos o antiguos, monedas de metales preciosos o artículos de orfebrería? Incluso, también se habló de restos óseos que podrían ser de origen humano... Nada de eso fue encontrado. Corrieron versiones infundadas. Según su conocimiento, ¿qué personas intervinieron al momento de la inspección y cómo pudo suceder que sean llevadas muestras del lugar? Desconozco quiénes intervinieron al momento de la inspección. A mí me invitó la señora Leonor Muniagurria de Bassi a ver el pozo ya abierto. Concurrí el lunes 9 de octubre. Al llegar me encontré con el párroco, el diácono José Fernández, la señora de Bassi y dos obreros. ¿Muestras de qué? ¿Adónde fueron llevadas? Que yo sepa, no se llevaron nada del lugar porque no se encontró nada más que tierra, cascotes, envoltorios de golosinas. Por lo general, los sacerdotes dejaban un registro exhaustivo y por escrito detallando las cuestiones relacionadas a la Iglesia, incluida la parte arquitectónica. ¿Existe en la Catedral de Goya algún documento histórico que dé cuenta de este pozo? No leí todo el material reunido en el Archivo Parroquial, pero en los pocos libros de bautismo, casamiento y defunciones que consulté no observé alguna cita extraordinaria referida al pozo. Tampoco en las planillas de obra y notas del arquitecto Francisco Pinaroli (constructor de la Catedral). Tal vez haya en la parroquia o en el Archivo del Obispado de Goya otros libros de movimientos diarios o de movimientos internos donde consten esos registros, y/o documentos históricos. ¿Lo encontrado podría tener algún valor de tipo arqueológico o histórico que dé cuenta de la civilización anterior o que pueda dar cuenta sobre ciertos datos de la época? Desde el punto de vista histórico y cultural es un hallazgo sumamente interesante. Se asocia ese resto arqueológico a la identidad y a la memoria colectiva. La comunidad debe asimilar la importancia de su herencia arqueológica y el cuidado de sus recursos. Aumenta el valor de la Catedral y es un atractivo turístico. Hasta 1940 las metodologías, los procedimientos, los conceptos y marcos teóricos para abordar el Patrimonio Histórico eran precarios. ¿Quiénes serían las personas que habrían encontrado este espacio hacia 1990? En artículos periodísticos se hace referencia a los nombres del arquitecto Hugo Fernández Abeijón, arquitecto Gazzaneo (Buenos Aires) y el padre Tomás Von Schulz que llegó a Goya en 1987. ¿De que época data la construcción de la primera capilla de la ciudad de Goya? En el verano de 1805 los vecinos del Puerto de Goya fueron autorizados por el obispo Benito Lué y Riega a levantar la capilla. El propietario de las tierras donde se pensaba construirla, don Juan Francisco de Soto, hizo donación no sólo de ese solar, sino también del futuro corazón del pueblo: la plaza, comandancia, colectoría y cementerio. Concluyó la construcción en 1807. El 3 de febrero de 1826 fue saneada legítima y legalmente la propiedad del terreno donde se levantaba la modesta capilla. Quedó así expedito el camino para que la feligresía se abocase a la construcción de un templo mayor. Esta idea comenzó a proyectarse a fines de 1857. Se eligió el mismo sitio de aquella por su ubicación central y por el mayor número de vecindario y población de alrededores
Lunes, 30 de octubre de 2017
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