 ANTEOJITO
La atracción de grandes y chicos en la plaza Italia de Goya
En el marco de una iniciativa del intendente municipal Gerardo Bassi, la Municipalidad emplazó una escultura de Anteojito en un sector de la plaza Italia. Ya desde su ubicación privilegiada en la Costanera, la reproducción del querido personaje creado por Manuel García Ferre es una de las atracciones principales de chicos y no tan chicos que se acercan para examinar la escultura y sacarse fotos.
Intringulis Chingulis. Anteojito se sumó a ese virtual paseo de la historieta que tiene Goya con la serie de figuras que se instalaron en distintas plazas y paseos públicos. Anteriormente, el intendente municipal Gerardo Bassi inauguró una escultura de Hijitus junto a su perro Pichichus en plaza “San Martín”, donde estuvo acompañado de los alumnos de la Escuela Isabel King. Las primeras inauguradas fueron las figuras de Patoruzú (plaza “Cunumí”), de Manuelita (plaza “Plácido Martínez”), Mafalda (en la plaza “Mitre”). También, Clemente en el playón deportivo del barrio 9 de Julio. Se destaca también la instalación de larguirucho en el playón del barrio Los Eucaliptos.
EL PERSONAJE Anteojito era un niño de unos 8 años, que llevaba grandes anteojos, (de ahí proviene su nombre), muy tranquilo e inteligente, que vivía con su tío Antifaz. Se decía que era primo de Hijitus y amigo de Calculín, todos personajes creados por el mismo dibujante, su latiguillo era "¡Intríngulis-Chíngulis! ¡Uh! ¡Uh! ¡Uh!".
Este querido personaje argentino de historieta fue creado por el dibujante Manuel García Ferré. Aparecía en la revista homónima, editada en el periodo 1964-2001, que llegó casi a tener 2000 números. A fines de los años 1960, logró vender más de 250 000 ejemplares, todo un récord para una revista infantil.
Anteojito surgió en una campaña publicitaria durante comienzos de la década de 1960, a través de la pantalla del Canal 9 de Buenos Aires. Recién en 1964, luego de varios años de incesantes emisiones de sus cortos publicitarios, García Ferré inició la publicación de su propia revista semanal, titulada "Anteojito". En sus páginas se trató siempre de enseñar y entretener, con historietas, cuentos, y las leyendas y la enseñanza que marcaron a casi cinco generaciones.
La extraordinaria popularidad del personaje, motivó a García Ferré a realizar en 1972 un largometraje de dibujos animados con los personajes de su revista, llamada Mil intentos y un invento, convirtiéndose en el primer largometraje argentino de dibujos animados, y el primero premiado internacionalmente.
Lunes, 23 de octubre de 2017
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