Francia consiguió el boleto a la tercera final de Eurocopa en su historia tras vencer 2-0 a Alemania en el Stade Vélodrome de Marsella con dos gritos de Antoine Griezmann. El primero, tras un discutido penal.

La supremacía alemana primaba en los 45 minutos iniciales del partido, pero una polémica mano sobre el cierre de la etapa inaugural inclinó el marcador para el lado del local.

El trámite era parejo en llegadas, más allá de que el balón era propiedad del combinado teutón. Manuel Neuer se había lucido tapando un eximio remate de Antoine Griezmann y controlando sin problemas el tiro libre de Dimitri Payet. El arquero francés Hugo Lloris también tuvo trabajo: impidió que las irrupciones de Emre Can y Bastian Schweinsteiger se transformen en gol.

En el cierre de los primeros 45 llegó el quiebre del compromiso, tras la discutible mano del capitán alemán en el área que el árbitro italiano Nicola Rizzoli pitó en el área. El penal lo transformó en gol Griezmann, quien permitió que el equipo local se marche al entretiempo con la mínima ventaja.

Alemania sintió el golpe y lo demostró en la segunda parte, donde bajó considerablemente la intensidad de su juego. Los franceses se apoderaron del juego y consiguieron estirar la ventaja luego de un error defensivo del rival. Paul Pogba robó, entretuvo la pelota por la banda y sacó un centro que se topó con una mala respuesta de Neuer. Griezmann estaba en el centro del área y punteó la pelota al gol.

Tarde, los de Joachim Löw fueron en busca del descuento que los aproxime a un empate salvador. Julian Draxler sacó un potente remate tras una jugada preparada en el tiro libre que pasó cerca del arco francés. En la última, Lloris tuvo nuevamente una aparición fundamental frenando un letal cabezazo de Joshua Kimmich.

Francia consiguió sacar el pasaje que lo hará jugar la final de la tercera Eurocopa que se desarrolla en sus tierras. Al mismo tiempo, buscará el tercer título en este certamen de su historia. El rival serán Portugal y Cristiano Ronaldo, el próximo domingo en el Stade de France.

Jueves, 7 de julio de 2016