“La situación vivida en Monte Caseros, sobre todo en la producción de cítricos, es muy grave en lo vinculado a la estructura de los productores que atraviesan esta crisis en una realidad muy delicada”. Las lluvias afectaron las siembras y cosechas en la provincia y la preocupación se centra en si se va a poder volver a sembrar en junio.

La valoración provino del vicepresidente de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), Carlos Iannizzotto, luego de recorrer las zonas productivas de Corrientes que resultaron más afectadas por la inundación. La gran preocupación de los pequeños y medianos productores que sustentan su economía de la producción cítrica o de la horticultura, analizan si los suelos estarán aptos para volver a sembrar este invierno. Al respecto, el funcionario, que también es gerente de la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas (Acovi), se mostró preocupado por la situación de los productores inundados en el país y explicó: “En el recorrido que realizamos con Coninagro a cooperativas de Corrientes, Entre Ríos, Córdoba y Santa Fe vimos diferentes aspectos de las inundaciones. Lo difícil de calcular las pérdidas tiene que ver con que, en algunos lugares, todavía no se puede volver a sembrar ni tampoco se sabe cómo se va a reiniciar la siembra en junio. También desde el punto de vista humano, se necesita ayuda y colaboración en estas zonas. Además vimos en Pilar y en Esperanza, Santa Fe, que la cuenca lechera atraviesa una crisis angustiante. Todo el tema económico es gravísimo: estamos hablando de pérdidas que estimamos entre cinco y siete mil millones. Aún no está bien medido en cantidad de dólares, pero sí se sabe que es muy grave la situación de los que producen”.

Lunes, 23 de mayo de 2016