El Ministerio de Relaciones Exteriores puso la lupa sobre empleados con contratos anuales que ahora tienen incertidumbre sobre su futuro laboral.

El achicamiento en el Estado ahora podría alcanzar a los empleados de la Cancillería, quienes se sorprendieron este miércoles cuando fueron llamados a renovar sus contratos anuales, pero que ahora vencerán el próximo 31 de marzo, sometidos a la tan mentada "revisión" que se impulsa desde el Ministerio de Modernización que comanda Andrés Ibarra.

Estos empleados solían firmar contratos de un año de duración al comienzo de los mismos. Inclusive seguían trabajando a pesar de no tenerlos los documentos firmados, algo que ocurrió ayer. Sin embargo, ahora solo les renovaron desde el 1 de enero hasta el 31 de marzo inclusive y aclarando que el hecho de que puedan trabajar luego de esa fecha no implica una continuidad.

Viernes, 4 de marzo de 2016