Conviertete en emprendedor y mejora la calidad de vida de tu familia.

Voltea a tu alrededor. ¿Estás feliz en tu trabajo? ¿Con lo que haces? Son pocas las personas que pueden sentirse plenas al realizar su trabajo, mismo que les provee de lo necesario para mantener a la familia. Dice una frase que: "Quien trabaja en lo que le apasiona, nunca tendrá que volver a trabajar en su día".

Es claro que la vida da muchas vueltas y en ocasiones, nos coloca en lugares que no necesariamente nos gusta estar. Casi siempre por necesidad, tomamos algunas opciones que representan algo así como un tanque de oxígeno de emergencia y ayudan a solventar las problemáticas urgentes. Sin embargo, la costumbre a veces termina por devorar cualquier intención de cambiar y la persona "echa raíces" en ese lugar o situación que no le agrada, lo que termina por desgastar su ánimo y afectar su relación con la familia.

Atrévete a convertirte en un emprendedor

Esto no es fácil. En todo caso, no es para cualquiera. Emprender requiere de un atrevimiento bárbaro, de una autoestima por encima del promedio y más que eso, de la aceptación total del miedo a perder.

Emprender significa buscar nuevas opciones con lo mínimo, jugar a ganar con todas las opciones en contra. Emprender te ayudará a ver la vida de otra forma, con otras problemáticas y salvedades. Crearte una nueva disciplina, costará lágrimas pero con paciencia y esfuerzo, las posibilidades de que mañana estés donde siempre has querido estar, aumentarán de forma exponencial.

A continuación, te daré cuatro sugerencias para que puedas volverte emprendedor y, con ello, mejorar la calidad de vida de tu familia.

Confía en ti

Para volverte emprendedor es básico que confíes en tus capacidades. Al estar seguro de tus habilidades, transmitirlas confianza en tu entorno familiar, esto te ayudará a superar los problemas que surjan siempre con la seguridad de que harás las cosas lo mejor posible. Sueña en grande, pero inicia siempre en pequeño.

Experimenta retos

Someterse a la rutina de despertar, vestirse, transportarse, trabajar y regresar, todos los días, acabará por matarte en vida. Además, esto te colocará en un estado de estrés constante que provocará muchas peleas dentro de casa. Reúnete con tu familia y diseñen nuevos planes para conquistar nuevos mundos. Se sorprenderán de lo que pueden hacer juntos.

Aprende a escuchar

Afortunadamente no lo sabemos todo, quizá tengas una gran idea pero sin los consejos de alguien, a quien le importes, seguro te estás limitando a pocas opciones. Al emprender necesitarás escuchar y atender sugerencias para que el proyecto crezca, lo mismo pasa con la familia, el gran proyecto, escuchar para razonar y crecer en conjunto. Escucha con la disposición de aprender. Escucha siempre y aplica lo que aprendas, para que nunca hagas las cosas igual: quien siempre aprende y aplica, está, en cada fracaso, un paso más cerca del éxito.

Piensa a futuro

Este nuevo siglo es muy complicado y, por lo mismo, pensar a futuro es complicado: muchas cosas cambiarán el día de mañana. Los hijos crecerán y dejarán de ser bebés. Así, con la paciencia que se requiere para cuidarlos, el emprender significa trabajar hoy para tener un mejor mañana. Sembrar y posteriormente cosechar, siempre será mejor el disfrutarlo con tu familia. Relacionado con este tema, te invito a leer estos artículos:

Viernes, 10 de julio de 2015