En los próximos días podrían surgir importantes novedades en el marco de la investigación de la causa denominada Ciervo Blanco. Una de ellas es que a la propietaria de la estancia Santa María del Aguapey, María Hilda Calabrese, quien se encuentra involucrada y actualmente detenida por orden de la Justicia federal, se le otorgaría la libertad condicional.

Fuentes calificadas señalaron que la Justicia federal se apresta a otorgar la libertad condicional a una de las personas imputadas en la causa Ciervo Blanco, operativo terrestre y aéreo realizado en octubre de 2013 por efectivos de Gendarmería Nacional, dependientes del Escuadrón Santo Tomé 57, que irrumpieron en una estancia de la zona de los esteros del Iberá, oportunidad en la que se detuvo a varias personas, entre éstas, dos aviadores de nacionalidad peruana y paraguaya. En el lugar, las fuerzas de seguridad decomisaron más de 300 kilogramos de cocaína de máxima pureza que estaban a punto de ser trasladados vía aérea presumiblemente a Río de Janeiro (Brasil). También se secuestraron tres avionetas especialmente acondicionadas para el tráfico de estupefacientes. Con el correr de los días, la investigación se profundizó y así fue que se detuvo primeramente a Hilda Calabrese y luego a Fiorentino Niemiz, este último sería en ese entonces la pareja de la dueña de la estancia. Al poco tiempo, la Justicia federal procesó a todos los detenidos y denegó pedidos de excarcelación de todos ellos presentados por sus abogados defensores.
A casi un año y medio del espectacular procedimiento que desbarató a lo que la Justicia caratuló como una banda internacional de traficantes, la causa tomó un giro que era de esperar y es que la Cámara Federal de Apelaciones de la ciudad de Corrientes se apresta a concederle la libertad condicional a María Hilda Calabrese, previo pago de una fianza en efectivo que supera los cien mil pesos. Actualmente, Calabrese se encuentra alojada en el instituto Pelletier de la Capital provincial.

Jueves, 19 de marzo de 2015