Tatiana Kulikova, una enfermera rusa que vive en Kirov -una ciudad ubicada en el centro de ese país-, fue despedida luego de sacarse varias selfies con varias personas moribundas dentro de la ambulancia en la que trabajaba.

Según afirma el diario Daily Mail, las imágenes que dio a conocer la enfermera tuvieron gran repercusión en Twitter hasta que fue descubierta por sus superiores, momento en que fue expulsada de su trabajo.

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En una de las imágenes difundidas, se puede ver a Kulikova haciendo el signo de la victoria frente a un paciente que acababa de sufrir un ataque cardíaco.

Tras descubrir las imágenes, sus jefes concertaron una reunión en la que Kulikova admitió haber realizado las fotos. Tras la confesión, fue despedida.

"Está claro que mientras estaba haciéndose las fotografías no estaba cuidando a sus pacientes. Además, muestra un cruel desprecio por el bienestar de los afectados, algunos de los cuales murieron después de tomarse esa foto", comentó Artem Golubev, un integrante del área local de salud, según diario ABC de España.
En tanto, el portavoz de los servicios de emergencia de la ciudad expresó que, ni bien se descubrieron las imágenes en las redes sociales, se decidió suspender a la enfermera. Posteriormente, llevaron a cabo una investigación y, tras obtener la confesión, la despidieron.

Por su parte, Kulikova prefirió mantener silencio y no atender a los medios locales tras conocerse la noticia.

Miércoles, 11 de marzo de 2015