Así lo reveló ayer el juez Federal de Corrientes, Carlos Soto Dávila. Aseguran haber encontrado pruebas que corroboran las sospechas de los investigadores. Además adelantaron que puede haber más detenciones y tienen pistas concretas del auto que utilizó la banda para mover a la menor.

Prácticamente esclarecido en un 80 por ciento el caso del secuestro de Juanita Goitia ocurrido en junio de este año, ayer a la mañana el juez federal Carlos Soto Dávila, junto al fiscal federal Flavio Ferrini, realizó una inspección ocular en la casa de las 550 Viviendas del barrio Pirayuí y confirmó que en ese lugar mantuvieron cautiva a la menor. La misma pertenece a los suegros de Fabricio Solari, el autor intelectual del hecho.
"Acá estuvo cautiva la nena. Eso lo confirman pruebas contundentes que hemos encontrado", precisó Soto Dávila y además explicó que "la casa es propiedad de gente que participó del secuestro y por ello no se descartan nuevas detenciones".
Para llegar a esa vivienda fue clave el testimonio de Raúl Godoy, el joven de 18 años que se transformó en el tercer detenido de la causa y sería quien cuidó a Juanita durante el secuestro.
El magistrado contó que ya tenían varias pruebas en contra de los detenidos y ahora se sumaron nuevos datos certeros que los incriminan.
"Estamos cerrando el círculo sobre los que participaron concretamente en el hecho", dijo el Juez Federal, quien anticipó que "hay posibilidades de que se produzcan más detenciones". "Acá no se descarta nada", agregó.
Respecto a la búsqueda del automóvil con que se realizó el secuestro, dijo: "Estamos muy bien orientados".

BUSCAN EL AUTO

En el marco de la investigación, Soto Dávila adelantó que están en busca del automóvil que se habría utilizado para el traslado de la menor a los distintos lugares donde estuvo cautiva.
Se trataría de un Peugeot 308, y la Policía no tiene certezas aún si se vendió o se cambió el color del mismo.

Viernes, 14 de noviembre de 2014