El ejecutivo comunal califica de Paro a la retención de servicios de los empleados municipales, y rompió las paritarias. Diagraman un esquema de recolección de emergencia, pero la basura se sigue acumulando por el desconocimiento de la población de la situación en el municipio.

Una recorrida por los barrios más populosos acusa una acumulación creciente de la basura en contenedores y en sectores donde los minibasurales proliferan.

De igual manera, en los canastos domiciliarios se observan los residuos que no han sido retirados ni durante la noche, ni en la mañana de hoy.

Los vecinos en su mayoría no conocen la situación, y con el correr de las horas siguen sacando la basura a la calle, mientras que carritos de cartoneros comenzaron a desperdigar las bolsas en busca de material reciclable, dejando esparcida la mugre por las calles.

De la misma manera, caballos y perros hacen su festín, lo que agrava más la situación ambiental y sanitaria.

Ante esta situación, y al avizorar un largo conflicto ante tantos días de feriados, el municipio anuncia un cronograma de emrgencia, que se hará con recolección precaria. Solo se abarcará prioritariamente la zona céntrica y algunos sectores populosos, pero no así los barrios de la periferia, adonde los camiones no ingresarán hasta tanto se solucione el conflicto.

La recolección será manual, ya que no funcionan los camiones que absorven el contenido de los contenedores, por lo que recomiendan no sacar grandes bolsas ni ramas, para facilitar el trabajo de los trabajadores de emergencia.

No se avizora una solución a corto plazo, la gravedad del conflicto se profundiza con una generalización del paro como respuesta al endurecimiento de las medidas que la gestión del intendente Fabián Ríos piensa implementar, entre ellas la declaración de ilegalidad del paro y la amenaza de sanciones a los empleados que incurran en la medida de fuerza.

Las presiones que se ejercieron en diferentes estamentos, hizo que se volviera en contra, ya que los obreros reaccionaron con mayor endurecimiento, dejando sin servicios de atención al público en las oficinas de El Piso, entre otras.

Al malestar salarial se suman las recientes incorporaciones de nuevos empleados con altos sueldos en el nivel de Neike Chamigo III, la reestructuración de diferentes secretarías que dejó a personal en disponibilidad, la falta de respuesta del gremio ante lo que consideran medidas persecutorias como el censo municipal y auditorías en diferentes áreas, y la presión política que se habría ejercido sobre empleados que no son de la afinidad partidaria del Ejecutivo.

Viernes, 28 de febrero de 2014