Tras los polémicos dichos que lanzó la actual pareja de Maradona, la madre de Dieguito Fernando redobló la apuesta y fue por más.

Un nuevo capítulo se suma al conflicto mediático que protagonizan Roció Oliva y Verónica Ojeda, la primera con quien afianza su relación con el correr de los meses y la otra que forma parte del pasado de Diego Maradona -con quien tiene a su pequeño bebé- y se animó a marcar territorio.

Todo comenzó cuando Rocío hizo una serie de declaraciones picantes: "Lo que pasó fue que, cuando ella se estaba yendo, yo salí a buscar a Diego para que entrara de nuevo a la casa, y ella empezó a gritarme desde su camioneta. Y ahí le dije: 'Gritáme lo que quieras, pero vos te tenés que ir y yo me quedo con Diego'", disparó, la joven , en diálogo con Ciudad.com.

Luego, sobre el regreso de Maradona a la Argentina, Oliva fue muy clara: "Diego me dijo que no va a venir para el cumpleaños de su hijo (es el 13 de febrero), que tiene mucho trabajo y hasta mitad de año no vamos a volver a la Argentina", sostuvo.

Furiosa con estas palabras, Ojeda no se quedó atrás y respondió: "La verdad es que estoy sorprendida, esta chica es una maleducada, es capaz de cualquier cosa. Yo estuvo 8 años con Diego, y toda la familia siempre sabe que fui muy educada con todos", sostuvo al diario Crónica.

Más tarde, se refirió a la pelea que se desató entre las mujeres el 31 de diciembre, Verónica dio su versión de los hechos: "Yo hablé con Diego el día anterior y me dijo: 'Me encantaría que traigas a Dieguito después de las 12, quiero empezar el año abrazando a mi hijo", manifestó.

Y agregó: "Rocío dijo: 'No tienen nada que hacer esta y este pendejo de mierda acá' por Dieguito Fernando -hijo en común que tiene con el ex DT-. Ahí fue cuando agarré a mi hijo y le dije a Diego que me iba porque no iba a tolerar que esta mosquita muerta diga estas barbaridades. Ella tiene terror de que Diego vuelva conmigo".

Por último, Verónica confesó la frase que le tiró a su enemiga: "Le dije: 'por qué no te vas a curtir a la 'Hiena' Barrios y a todo Córdoba', lo volvería a hacer 860 veces si se meten con mi hijo. Ella está acostumbrada a ser así tumbera, un papelón. Va a tener que bancarse mi carita toda la vida", concluyó, enojada.

Jueves, 9 de enero de 2014