La modelo está desesperada por separarse legalmente de Leonardo Fariña, pero no encuentra un papel muy importante.

El divorcio pendiente entre Karina Jelinek y Leonardo Fariña podría costar más tiempo y dedicación de sus abogados de lo que parecía en un principio. Como si el escándalo por las infidelidades del asesor financiero no fueran suficiente, tampoco está claro a quién pertenece el departamento que la pareja aún comparte en Palermo y encima la modelo no encuentra su acta de matrimonio.

Lo lógico antes de comenzar un trámite de divorcio es recopilar los documentos que certifiquen la unión, pero cuando Jelinek quiso revisar su acta de matrimonio, que debería estar en uno de los libros del Registro Civil donde se casó, se dio cuenta de que había desaparecido, informó el Diario Popular.

Jelinek se casó por civil con Fariña en una ceremonia muy sobria realizada en abril de 2011, de la que fue testigo su amiga Ana Rosenfeld. "Fui una de las pocas, por no decir la única, que estuvo presente en el mismo momento donde ante el juez ellos firmaron el acta matrimonial", expresó la abogada, especialista en divorcios de alto impacto mediático.

"Tal vez se traspapeló en el registro, pero yo doy fe de ese casamiento", reforzó Rosenfeld, antes de que su colega, Iván Mendoza, pida la nulidad del matrimonio en nombre -y para beneficio- de su cliente, Leonardo Fariña.

Por ahora, Jelinek debe esperar hasta abril de 2014 para que se cumplan los tres años de matrimonio que la ley requiere para inciar el trámite de divorcio. Sin embargo, la modelo ya presentó su carpeta para lograr una separación vincular, donde consta la falta de acta matrimonial, que según Rosenfeld fue debidamente firmada.

Domingo, 8 de septiembre de 2013