Tras el allanamiento en el sótano y en el departamento del portero, único imputado por el crimen de Ángeles Rawson, trascendió que los investigadores secuestraron el mencionado electrodoméstico para ser peritado.

Los investigadores del homicidio de Ángeles Rawson secuestraron en la noche del viernes una aspiradora en el edificio donde vivía la víctima y trabajaba el único acusado, el portero Jorge Mangeri, con la intención de determinar si fue utilizada para limpiar la escena del crimen.

Fuentes judiciales confirmaron que la aspiradora fue hallada en la terraza del edificio de Ravignani 2360, en el marco de un allanamiento ordenado por el juez de la causa, Javier Ríos, tras el ingreso de nuevos datos en el expediente.

Es que la última pista analizada por el magistrado apunta al testimonio aportado por un peluquero vecino al edificio de Ravignani, quien declaró en la causa que Mangeri le había pedido por su intermedio a una vecina que guardara una aspiradora.

El testigo, de nombre Humberto, relató que el viernes 14 del mes pasado, cuatro días después del crimen de Mumi, el portero lo fue a ver y tras decirle que estaba amenazado, le pidió que le entregara una nota a una vecina del séptimo piso en la que decía: “Sra. Sofía ponga la aspiradora en su lugar”.

Los investigadores sospechan que el portero pudo haber utilizado ese electrodoméstico, que ahora deberá ser sometida a peritajes, para limpiar rastros que lo incriminaran.

Los voceros consultados dijeron que también fue allanado el domicilio de Mangeri, donde fueron encontrados rastros genéticos de Ángeles que llevan a los investigadores a pensar que es posible que ese lugar haya sido la escena del crimen.

Domingo, 28 de julio de 2013