El hecho ocurrió el martes por la tarde en el local que se encuentra en calle La Rioja casi 9 de Julio de Capital. La empleada informó que la malviviente se alzó con $1.500 y tres pares de zapatos. “Me apuntó y me dijo que me vaya al baño”, relató la damnificada.

A escasos metros de la casa matriz del Banco de Corrientes, una mujer a punta de pistola robó en una zapatería. El hecho ocurrió el martes por la tarde en el local ubicado en calle La Rioja al 814 de la capital provincial.

Los delincuentes no miden espacio, tiempo ni lugar. El martes, alrededor de las 18:45, una mujer ingresó en el local comercial de calle La Rioja casi 9 de Julio con la firme intención de delinquir.

De acuerdo al testimonio suministrado por la empleada del comercio, la delincuente ingresó, observó el movimiento del lugar y luego dio con su cometido.

Lo curioso es el horario y el lugar del hecho. Sí, frente a la zapatería de nombre “Zeus”, se encuentra la sede del Banco de Corrientes y en esta zona el movimiento en horario comercial es constante.

Pero está claro que estos tiempos para la delincuencia no importan.

El otro dato llamativo es que la protagonista del acto delictivo es una mujer de aproximadamente 45 años, quien a punta de pistola logró intimar a la empleada del local y quedarse con el botín.

“Lo que recuerdo es que antes de que se produjera el robo, una cliente realizó una compra de 1.200 pesos en efectivo. En ese momento, con actitud sospechosa, esta persona -la malviviente-, se acerca con un zapato, cuando intenta pagar me apunta con un arma de fuego y me dice que me dirigiera hasta el baño. Es ahí donde aprovecha y retira la recaudación y se lleva más productos del local”, aseguró la damnificada.

Según las primeras informaciones brindadas por efectivos policiales, la delincuente se llevó tres zapatos y una suma de dinero en efectivo que rondaría los 1.500 pesos.

“Es la primera vez que nos pasa, fue un hecho muy fuerte en pleno centro y por la tarde”, dijo la propietaria del comercio, Carmen Colodrero, a una emisora local.

Ayer por la mañana la zapatería decidió abrir. La empleada aún permanecía con temor por lo sucedido.

En cambio, por la tarde el panorama fue otro ya que las puertas estaban cerradas.

Jueves, 25 de julio de 2013