Se trata de Vanesa Soledad Galván a quien la encontraron responsable de haber contratado un sicario para matar a su pareja. El crimen ocurrió en 2016. El responsable material del asesinato luego fue encontrado muerto con un tiro en la cabeza.

La Corte Suprema de Justicia de la Nación dejó firme la condena a prisión perpetua contra Vanesa Soledad Galván, acusada de ser la autora intelectual del homicidio de su pareja, Ramón López, ocurrido en agosto de 2016 en Esquina, Corrientes. El Superior Tribunal de Justicia de Corrientes ya había confirmado la sentencia a prisión perpetua como partícipe necesaria, al considerar probado que brindó datos clave para que se concretara el crimen.

En la resolución del 27 de marzo de 2025, la Corte Suprema rechazó el recurso de queja presentado por la defensa de Vanesa Soledad Galván y dejó firme la condena a prisión perpetua dictada por el Tribunal Oral Penal de Goya y confirmada por el Superior Tribunal de Justicia de Corrientes (STJ), por el homicidio agravado por el vínculo de su esposo, ocurrido en 2016 en la ciudad de Esquina.

Se consideró que el planteo era inadmisible conforme el artículo 280 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación. La medida de la corte contó con los votos de los doctores; Horacio Daniel Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti.

El hecho ocurrió en agosto de 2016 en Esquina, cuando la víctima regresaba de su trabajo y fue atacada a balazos en la vía pública. Los jueces consideraron acreditado que el crimen fue planificado y que sin la colaboración de la mujer, no podría haberse concretado en esas condiciones.

El voto del STJ: la participación necesaria y el aporte de información clave

En 2021, el Superior Tribunal de Justicia de Corrientes había rechazado el recurso de casación de la defensa y confirmado la sentencia a prisión perpetua dictada por el Tribunal Oral Penal de Goya.

El voto del ministro del Superior Tribunal de Justicia, doctor Alejandro Chain —al que adhirieron los demás miembros del STJ— sostuvo que si bien no había prueba directa, el conjunto de indicios valorados con sana crítica racional permitía tener por acreditado el rol de Galván como partícipe necesaria: "Su aporte se encuentra agotado con la cooperación prestada al brindarle al autor del hecho datos precisos y contundentes sin los cuales el mismo no podría haber sido ejecutado en las circunstancias de tiempo, modo y lugar debidamente acreditados", afirmó.

Según la reconstrucción judicial, Galván habría mantenido una relación sentimental con el autor material del hecho, a quien —a cambio de dinero— le brindó detalles sobre los movimientos de su esposo y le facilitó los medios para ejecutar el homicidio.

"La modalidad comisiva del suceso histórico analizado surge obligatoriamente de la participación que le cupo a la condenada, pues se encuentra probado que mantenía una relación amorosa con el autor y era quien sabía con certeza el horario de regreso de su cónyuge y el trayecto que transitaba en soledad para llegar a su domicilio", sostuvo el fallo del STJ.

EL HECHO

El crimen ocurrió cuando López volvía de su trabajo y fue asesinado con dos disparos en la espalda. Según la investigación, Galván contrató a un sicario, Gustavo Daniel Alegre, para ejecutar el hecho. Se menciona que había mensajes de WhatsApp y el testimonio de una testigo que ubicó a Alegre en Esquina el día del crimen. Una semana después, el cuerpo de Alegre fue hallado con un disparo en la cabeza en Santa Fe, en un caso que aún no fue esclarecido.

El Tribunal Oral Penal de Goya la condenó en 2018 como partícipe necesaria del delito de homicidio calificado por el vínculo, y la sentencia fue confirmada luego por el STJ de Corrientes y por la Corte Suprema, que rechazó los recursos presentados por la defensa. Galván permanece privada de su libertad desde 2016 y está alojada en el Instituto Pelletier.

Martes, 1 de abril de 2025