Después de que se desmoronaran todas las ilusiones en la Libertadores de la “Lepra”, ya está confirmada la salida del “Tata”, quien en principio, no dirigiría hasta el 2014. Pero al mismo tiempo fue confirmado su reemplazante y será de la casa: Alfredo Berti. En tanto, hay mucha incertidumbre por el futuro de Scocco, con un pie afuera del club, y de Heinze, quien esperará algunos días para decidir si se retira o no. ¿Podrá mantener los éxitos?

En Belo Horizonte quedaron extintos los sueños coperos de este Newell’s, que no pudo llegar a la tercera final de América de su historia. La derrota en los penales contra el Mineiro seguro que calará hondo en el búnker “leproso”, pero no variará mucho respecto al futuro, porque las cartas parecen estar echadas. Haya pesado o no, haya influido o no, haya gustado o no, Martino ya había adelantado que al término de la Copa se iba a alejar en busca de otros rumbos y así lo ratificó tras la caída en Brasil.

Pero precavidos, los dirigentes “rojinegros” ya habían tomado la determinación de darle la chance al director técnico de la Reserva, Alfredo Berti, quien conoce al plantel a la perfección, aún más a los juveniles -la gran apuesta de la institución en la actualidad-, y sobre todo, es otro con sentido de pertenencia, el mismo que hizo tomar la decisión de volver a Bernardi, Mateo, Scocco, Heinze, Maxi Rodríguez y hasta al propio “Tata”. No le será fácil igualar la tarea del ex DT de la Selección de Paraguay, pero contará con un margen de transición importante.

Es que el “Loco” se dará el gusto de trabajar sin la necesidad imperiosa de puntos, esa que tenía Martino cuando pisó otra vez Rosario, cuando Newell’s estaba sumergido en la tabla del promedio junto a otros rivales como Independiente, que terminaron sufriendo el descenso o salvándose de milagro. Con el pase a la próxima Libertadores asegurado y sin doble ni triple competencia (a la eliminación de la Copa Argentina se le agregó la no clasificación a la Sudamericana por perder la Super Final con Vélez), tendrá tiempo de sobra para moldear esquemas y nombres.

Los tiempos corren y mientras los futbolistas que más tarde terminaron la competencia en el medio se tomarán unas merecidas –y cortas- vacaciones, los dirigentes se encargan de gestionar las renovaciones de algunos, afrontar las opciones de compra de otros (como Vergini, Orzán y el peruano Cruzado) e intentar solventar alguna venta, siempre necesaria. En el ambiente, mientras tanto flotan los apellidos de dos ex: Hernán Bernardello y Damián Manso, quienes extenderían esta ‘ley Newell’s’, de ser, pertenecer y volver, en caso de ser repatriados.

Pero no todo es certeza en la “Lepra”, que tendrá nuevamente como incentivo la disputa del clásico de la ciudad tras el ascenso de Central, ya que algunos todavía no tienen decidido si seguirán. Son los casos de Ignacio Scocco, quien parece estar más fuera que dentro (se iría al fútbol brasileño o al inglés en busca de la atención de Sabella en la Selección) pero que ya prometió que regresará y se retirará con la ‘Rojinegra’, y de Gabriel Heinze, quien se realizará estudios en su rodilla derecha y pondrá en la balanza diferentes cuestiones antes de oficializar o no su retiro.

Las buenas para los simpatizantes “leprosos” es que Maximiliano Rodríguez, quien mostró estar a la altura de las circunstancias en momentos claves y a un nivel superlativo, persistirá en los moldes del equipo después de negarse a ofertas irresistibles de Europa y otros destinos. Se sumará a Lucas Bernardi, quien no aclaró cuál es su panorama respecto a su futuro, pero siendo el cerebro y corazón de Newell’s mismo, será difícil que justo en este momento se aleje del fútbol.

En esta etapa de transición, a Newell’s se le viene el desafío mayor: mantener todo lo que obtuvo en este ciclo de Gerardo Martino durante un año y medio.

Viernes, 12 de julio de 2013