Manifiestan preocupación por posible cambio de la legislación vigente que regulan el funcionamiento de estos comercios. Los vecinos buscan ser tenidos en cuenta y por este motivo elevaron una nota a la concejal Cecilia Gortari

Sra. Concejal
Lic. Cecilia Gortari
Presente
De mi mayor consideración
Me dirijo a Uds. como vecino afectado por el funcionamiento del establecimiento nocturno Moon para hacerle llegar algunas consideraciones respecto a esa problemática que me entero, por los medios, vuelve a ser tratado por el Cuerpo Legislativo que integra.
Está en vigencia la Ordenanza N° 2145 promulgada el 18 de agosto de 2021 con la que creía se daba por superado este problema, pero parece que se intenta que no sea así.
Esa norma explicita en sus considerandos las razones de nuestra demanda:
“…los vecinos de la Ciudad de Goya, en reiteradas ocasiones han manifestado que son víctimas de daños y perjuicios tanto materiales y psicológicos por la presencia de locales comerciales mencionados (se refiere a las confiterías, discotecas, etc.)
…los vecinos más próximos a estos centros de ocio, son los más afectados por los altos niveles de música, generándoles un malestar al no poder conciliar el sueño; por la violencia engendrada por las personas que acuden a estos lugares, generalmente dichas personas se encuentran con un alto grado etílico lo cual genera sentimiento de inseguridad; por el vandalismo, debido a que en reiteradas ocasiones han manifestado vidrios rotos por el lanzamiento de botellas, grafitis, golpes contundentes en la puerta de sus hogares; ingreso no autorizado de personas en sus jardines delanteros, daños a los mismos, entre otros hechos delictivos en altas horas de la noche.”
Esta es la razón de ser esa Ordenanza, viene a resolver una cuestión de un vecindario de la ciudad que se ve alterado por el funcionamiento de un establecimiento nocturno. Ese es el problema principal y podríamos decir el único. Hemos esperado con paciencia tres años, seguimos soportando la inequidad, creíamos que se había resuelto por la vía institucional, se había dado plazo oneroso, estaban establecidos los responsables de la aplicación y las obligaciones de quienes obtienen pingües ganancias con ese negocio y ahora nos encontramos que se intenta desandar lo recorrido y para ello se buscó, al parecer un artilugio, presentar el mismo tema de manera distinta, ya no como parte de complementar el Código de Edificación sino de ir hacia un “Código de Convivencia” (sic) los que somos docentes de eso sabemos, dice Fernando Oneto “Las norma de convivencia son un conjunto de pautas de comportamientos sociales que han sido establecidas por un grupo de personas o comunidad. Estas normas se sustentan en el respeto que debe existir entre los individuos, buscan promover el buen trato y la vida en armonía dentro de la sociedad” lo que en los hechos, sin necesidad de norma escrita, por convencionalismos sociales y educación ya existe en el vecindario, la convivencia es entre personas y en esta zona convivimos con docentes y alumnos de una escuela privada; con médicos, enfermeros y pacientes de un clínica; con los comerciantes del lugar; nos conocemos todos; nunca existió ninguna fricción o enojo entre nosotros por el contrario somos solidarios y respetuosos; muchos descienden de familias que hace mas de un siglo habitan allí. Con quienes no convivimos, ni siquiera conocemos, son con los dueños del negocio cuestionado, con los empleados y concurrentes dado el particular horario de funcionamiento (de 2 a 6 de la madrugada). Ahora bien, si la idea detrás de esa llamada “convivencia” está que aceptemos y nos acostumbremos a vivir indignamente por desidia de las autoridades eso no va a ocurrir así tengamos que recurrir a otros ámbitos para lograr que se cumpla con lo vigente. Según la expresión de algunos concejales daría la impresión que se busca derogar o cambiar; desde hace unas semanas nos puso en alerta lo que decían en los medios públicos provocando malestar en los vecinos y para no llegar al conflicto es necesario cumplir con la Ordenanza 2145. En algunos momentos da la impresión que hay decisión tomada sin consultar a los perjudicados y podría caer en la tentación de pensar que habría subjetividades en nuestros concejales no acordes con la búsqueda del bien común y trabajar para felicidad de los vecinos.
Sin otro particular deseándole suerte y éxitos en su gestión la saluda muy atentamente.

CARLOS EDUARDO FERNANDEZ
DNI 11709162

Viernes, 27 de septiembre de 2024