Como un modo de vulnerar las defensas antiaéreas ucranias, Rusia está utilizando cada vez más bombas aéreas o deslizantes desde aviones Su-35 y Su-34 para evitar el ingreso en zonas en las que las aeronaves pueden ser alcanzadas por el fuego enemigo.

Las fuerzas rusas utilizan cada día una veintena de bombas aéreas, también conocidas como deslizantes, en la línea del frente, para evitar que sus aviones entren en la zona en que pueden ser alcanzados por las defensas aéreas ucranianas, explicó el portavoz de la Fuerza Aérea de Ucrania.

“Han empezado a usar bombas deslizantes que pueden volar hasta 70 kilómetros”, afirmó Yuriy Ignat, el portavoz militar, en el servicio de noticias nacional, citado por la agencia ucraniana de noticias Unian. “El enemigo usa hasta 20 de esas bombas al día a lo largo de la línea de demarcación”, añadió.

Ignat explicó que las fuerzas de Rusia utilizan aviones Su-35 y Su-34 para lanzar estas bombas sin tener que penetrar en el espacio en el que son vulnerables a los misiles de las defensas antiaéreas de Ucrania.

FOTO: SHUTTERSTOCK. UN SU-35 ROMPIENDO LA BARRERA DEL SONIDO.
El portavoz militar insistió en que Ucrania necesita más sistemas antiaéreos y aviones modernos para repeler los ataques aéreos a distancia del enemigo.

Las bombas aéreas o deslizantes completan una trayectoria de varios kilómetros desde el momento en que son lanzadas desde el avión.

A diferencia de las bombas guiadas o inteligentes, que Rusia también está utilizando en el frente, las bombas aéreas no están teledirigidas y siguen la trayectoria que se les imprime al lanzarlas.

Miércoles, 5 de abril de 2023