El joven contó al Tribunal de Juicio que su padre tenía a su hermano encerrado en una habitación sin ventilación y esposado. El jueves se realizarán los alegatos.

Culminó la ronda de testimonios en el juicio a Juan Hualberto Aubel (60), retirado de la Policía de Corrientes, acusado del delito de abandono de persona de un padre hacia el hijo, calificado por el resultado de un grave daño en la víctima, en concurso real con privación ilegítima de la libertad.

Los últimos en comparecer fueron sus otros hijos. Y uno de ellos complicó su situación.

Fueron tres hermanos de la víctima los que declararon ante el Tribunal de Juicio.

Ellos son Pablo Andrés Aubel, María Dora Aubel y Blanca Gladys Aubel. Además, prestó testimonio un vecino de la familia Aubel, Antonio Ferreyra.


En su declaración, Pablo Aubel incriminó a su padre, dijo que convivió con él y que “la convivencia era mala… más mal que bien”, puntualizó.

Sobre su hermano Juan Aubel, relató que su padre “lo tenía encerrado y esposado. Estaba en una habitación, esposado, sin ventilación y la ventana estaba con cadena y candado”, precisó el portal de noticias Confirmado.

Las hermanas tuvieron relatos distintos al de Pablo Aubel.

María Dora Aubel manifestó que su hermano (Juan Aubel) “vino desmejorado, después de que estuvo al cuidado de su tía”.

Al respecto del “prolapso rectal”, que sufre la víctima, sostuvo que “cuando le picaba, se rascaba mucho, no había forma de sujetarlo para evitar que se toque”.


Por su parte, Blanca Gladys Aubel aseveró que a su hermano “nunca le faltó nada, recibía la atención de todos” y que “de un día para otro cambió” producto de un brote psicótico.

Describió a la casa donde atendían a su hermano “con comodidades” y agregó que la víctima “gritaba de la nada”.

Por último, también declaró Antonio Ferreyra, vecino de la familia Aubel.

Ferreyra dijo ser pastor de una iglesia y aseguró que “se escuchaban gritos por el dolor cuando le picaba” prosiguió diciendo “él se quejaba, no pedía socorro, siempre había gente que lo asistía”.

Señaló que “en las redes sociales de La Cruz, se dijeron cosas, tales como que el chico estaba esposado, o que se escapaba, pero yo nunca vi nada”.


El hecho ocurrió en la localidad de La Cruz, en una fecha que hasta el momento no se puede precisar con exactitud, pero que sería el mes de septiembre, circunstancias en que, según la denuncia de Fiscalía, Juan Hualberto Aubel coloca en situación de desamparo a su hijo, Juan Leonardo Aubel, quien padece de esquizofrenia, siendo éste incapaz de valerse por sí mismo y al que debía cuidar, abandonándolo, colocándolo así en una situación de desamparo al tenerlo encerrado bajo llave, en una habitación de la vivienda, con las manos esposadas delante de su cuerpo y sin brindarle las más mínimas condiciones de higiene y ventilación, de cuidados y curación respectiva y cuya falta de tratamiento y medidas higiénicas, provocaron a la víctima, un mal estado de salud general, anemia crónica y desnutrición, heridas dermatológicas infecciosas por micosis (hongos) y otra lesiones de carácter graves, que lo inhabilitaron a realizar tareas habituales.

Según sostiene la acusación, Aubel (h) fue privado ilegítimamente de su libertad, al haber sido esposado por su padre, en ambas muñecas por delante de su cuerpo, dentro de la vivienda donde residían.

Martes, 29 de noviembre de 2022