La ex mujer de Maradona siguió con su recorrido mediático y rompió en llanto en Intrusos. “Ojalá cambie y sea buen padre. No sé por qué me hace esto”, expresó la ex del Diez entre lágrimas. Además contó: "Me besó en la boca cuando visitó al nene y después se fue con su pareja. Me sentí una tarada".

Verónica Ojeda rompió el silencio con Susana Giménez, siguió en Desayuno Americano y terminó su recorrido mediático en un móvil con Intrusos, el ciclo de Jorge Rial.

“No sé por qué Diego me hace esto. Me pone triste no poder hablar de mi hijo. Estuve los nueves meses sola. Me duele mucho todo esto. Me dolió que Diego haya venido con su novia a mi casa. Fue una falta de respeto. Me decepcionó mucho”, expresó Verónica, totalmente quebrada, publicó Diarioshow.com.

Con lágrimas en los ojos, la Ojeda continuó: “Me duele lo que está haciendo ahora. Yo no me lo merezco. Maradona no lo quiere a Dieguito, su hijo. Ojalá cambie. Yo quiero que mi bebé tenga una buena familia. Pero Diego me abandonó y se fue. Lo desconozco a Diego. Él cambió mucho desde que está con Rocío, su nueva novia”.

“Es una locura no poder hablar de mi hijo. ¿Por tener un hijo me hacen todo esto?”, se indignó y le respondió a las hijas del Diez, Dalma y Gianinna: “No voy a estar pendiente de lo que digan en Twitter las hijas de Diego. Son chiquilinadas”.

Entre otras cosas, la ex del deportista dijo que “Diego no cumple como padre. Tengo que hablar con los abogados de él para ver cómo sigue el tema. Desde que me cortó la tarjeta no me pasa plata por alimentos, en abril".

Por otro lado, Vero aseguró: “Tenía miedo de que le pase algo a mi hijo durante mi embarazo, por eso pensé en tenerlo en una clínica de Ezeiza”.

Sorpresa

Vero contó que "cuando Diego vino a visitarme hace unas semanas, me besó en la boca. Y lloramos juntos. Después salió y se fue con su pareja. Yo me sentí una tarada".


Martes, 4 de junio de 2013