La primera ministra británica, Liz Truss, reconoció en una entrevista que fue "demasiado lejos demasiado rápido" con sus medidas fiscales.

La primera ministra británica, Liz Truss, pidió públicamente perdón por sus "errores" en políticas fiscales al afirmar que fue "demasiado lejos, demasiado rápido", y reiteró su intención de continuar al mando del país y del Partido Conservador hasta que se celebren las próximas elecciones.

"Reconozco que he cometido errores. Lo siento por esos errores, pero he enmendado esos errores. He nombrado a un nuevo ministro de Finanzas y he recuperado la estabilidad económica y la disciplina fiscal", afirmó Truss ayer en declaraciones a la televisión británica. Hubiera sido "irresponsable" no cambiar de rumbo.

Truss reconoció en la entrevista que fue "demasiado lejos demasiado rápido", aunque insistió en que la fórmula es "impuestos bajos, crecimiento alto", si bien ahora con la "prioridad" de preservar la estabilidad.

En cuanto a las críticas desde su propio partido -son ya cinco los diputados conservadores que han pedido su marcha-, Truss afirmó que está concentrada en "trabajar para los británicos".

Ayer lunes el nuevo ministro de Finanzas de Truss, Jeremy Hunt, anunció la anulación de casi todas las medidas incluidas en el minipresupuesto que provocó un terremoto en los mercados y la caída de la libra esterlina.

Martes, 18 de octubre de 2022