BOCA GANO CON POLEMICA
Boca venció a Cruzeiro y logró una interesante ventaja en la serie de cuartos de la Copa Libertadores
En la Bombonera, ganó 2 a 0 con goles de Mauro Zárate, tras una asistencia perfecta de Pablo Pérez, quien anotó el segundo. La visita terminó con diez por la expulsión de Dedé, a instancias del VAR
Boca superó con creces un duro escollo en su ilusión de avanzar en la Copa Libertadores, su principal obsesión. Por la ida de los cuartos de final, en La Bombonera, venció 2 a 0 al poderoso Cruzeiro con goles de Mauro Zárate, tras una impecable habilitación de Pablo Pérez, el autor del segundo. El árbitro fue el paraguayo Eber Aquino.
Durante la primera etapa, Boca pasó por todos los estados de ánimo. Producto de la ansiedad, se mostró muy nervioso al comienzo y eso lo llevó a cometer errores muy graves en salida que posibilitaron contragolpes interesantes al Cruzeiro. También estuvo impreciso, sobre todo Pablo Pérez, a quien le costó meterse en el partido. Recién en la genialidad de su asistencia pudo sentirse más seguro, aunque falló mucho en los pases y tuvo poca recuperación.
Cruzeiro no contó con muchas jugadas tampoco, más bien algunos disparos de media distancia. Sin embargo, su aplomo para salir a jugarle en campo contrario a Boca en la Bombonera le trajo mucha preocupación a los "Mellizos" Barros Schelotto en los primeros minutos.
Al minuto de juego, los brasileños avisaron con un cabezazo que terminó con la pelota en el palo. Boca respondió recién a los 14′, cuando hubo una buena jugada colectiva que terminó con pared de Mauro Zárate y Benedetto, que devolvió con clase, y el ex Vélez de frente al arco remató, desvío y córner.
Al promediar la etapa, el "Xeneize" comenzó a mejorar y las triangulaciones aparecieron. A los 22′, dos acciones claras de peligro: primero fue una habilitación de Pablo Pérez para Pavón, quien envió un centro al corazón del área que Nandez no pudo conectar; y la siguiente con una pérdida en salida de Cruzeiro que finalizó con una buena jugada individual de Benedetto, para un remate en la puerta del área.
Aunque Boca mejoró, el hueco que hubo entre la línea media defensiva y los delanteros fue muy grande. Así fue como sufrió el vértigo del Cruzeiro, que cada vez que recuperó la pelota salió de inmediato al contragolpe. Sin embargo, el "Azulao" no tuvo peso en la ofensiva.
Miércoles, 19 de septiembre de 2018
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